Casa Terraza
Este proyecto arquitectónico es una casa de cuatro pisos que combina diseño moderno con funcionalidad, optimizando el espacio y el entorno para ofrecer una experiencia de vida cómoda y estética. La distribución de los espacios se centra en el uso eficiente de cada nivel, con habitaciones situadas en el primer piso para un acceso más privado y áreas sociales en el segundo piso que aprovechan la doble altura para crear un ambiente abierto y luminoso. La cubierta superior se transforma en una terraza multifuncional, proporcionando un espacio adicional para el ocio y la interacción social al aire libre.
- Área: 205 m2
- Cliente: Marien Mercado
- Estado: Diseño arquitectónico
- Localización: Propuesta
La casa está construida con una estructura de pórtico en concreto y está revestida en su exterior con ladrillos arquitectónicos que aportan tanto resistencia como un atractivo estético. Grandes ventanales en el segundo nivel maximizan la entrada de luz natural en las zonas sociales, mientras que las habitaciones en el primer piso ofrecen privacidad y conexión directa con el entorno exterior. El diseño incluye un mezzanine en la parte posterior, que se utiliza como biblioteca y cuarto de juegos, combinando espacios de recreación y estudio. Además, la escalera, situada a un costado de la entrada principal, proporciona acceso vertical a los diferentes niveles y termina en una amplia terraza en la cubierta.
El diseño interior se caracteriza por la exposición del ladrillo, que añade calidez y cohesión visual a los espacios. El mobiliario en las áreas de cocina, comedor y sala es atractivo e inteligente, ofreciendo un diseño que es funcional y estéticamente agradable. La sala de estar, comedor y zona de TV en el segundo piso se destacan por su diseño de doble altura, creando un ambiente espacioso y abierto. La terraza en la cubierta superior está equipada con mobiliario para exteriores, una zona de bbq, y ofrece vistas hacia la zona verde circundante. Exteriormente, el acceso vehicular está protegido por muros de piedra y un piso de grava fina, lo que entrega una transición suave entre el entorno natural y la estructura arquitectónica.
El diseño de esta casa maximiza el uso del espacio y la luz natural, creando un ambiente que es tanto funcional como acogedor. La integración de grandes ventanales y el uso de ladrillo como material principal aseguran una experiencia de vida cálida y llena de luz. La distribución de los espacios permite una clara separación entre áreas privadas y sociales, mejorando la funcionalidad y comodidad del hogar. La terraza en la cubierta ofrece un espacio adicional para el entretenimiento y el descanso, añadiendo valor a la propiedad al proporcionar un entorno ideal para eventos familiares y sociales. Además, el diseño respeta y complementa el entorno natural, integrando la casa de manera armoniosa con el paisaje circundante.
